domingo, 17 de junio de 2012

El Sendero victorioso de la vida






La Iniciación del Diez

YO SOY VICTORY. Vengo con la autoridad de Alpha y Omega, para desafiar todo lo que se opone a la victoria de la conciencia de la humanidad y de todo el cuerpo planetario. Vengo con curación en mis alas y vengo con mil legiones de Victory y cada legión está compuesta por diez mil ángeles de la Victoria del Gran Sol Central.

La iniciación del número diez, es la prueba de la hora, la prueba de todo el cuerpo planetario. Y así os dijo a cada uno de vosotros, pedid para que podáis recibir esta iniciación del diez, del Señor Maitreya. Y habiendo pedido, permaneced en vigilia para recibir, porque el Señor no fallará para concederos vuestra petición y no debéis encontraros sin la suficiente preparación, cuando la prueba venga.

YO no estoy interesado en estudiantes “C”. YO quiero estudiantes “A” para Alpha. Y no estoy interesado en aquellos que pasan las pruebas raspando. YO estoy interesado en aquellos que desean pasar las pruebas con honores. Estudiantes “A”, Hijos de Alpha, la flor y nata, estos son los que nosotros tomaremos y al resto dejaremos atrás.

La prueba del diez es la prueba del desprendimiento. ¿Estáis conscientes del ser cómo humano o cómo divino? En el crisol de esta prueba, se os pedirá decidir: ó lo humano ó lo divino.

La espada de la victoria descenderá y a ¿qué lado os colocaréis? ¿Permaneceréis a la derecha ó a la izquierda? Esta es la elección. Esto debe ser hecho tanto en las pequeñas como en las grandes cosas –en todas las cosas-. Diariamente y a cada hora, debéis elegir ganar la marca de Alpha.


El Momentum del Diez Mil-por Diez Mil

Vengo entonces, a traer el momentum de mis legiones, quienes han pasado la prueba con honores. Estos son los estudiantes “A”, que están en formación delante de vosotros. Ellos son como pilares de fuego dorado, fuegos de la iluminación que permanecen en el templo de nuestro Señor, puros e inmaculados delante de su trono. Ellos están listos para transmitir su momentum a aquellos de vosotros que quieran pasar esta prueba.

Entonces, os digo, levantaos, [la audiencia se levanta]. Permaneced de pie para recibir el momentum de los Hijos e Hijas de Alpha, porque todo el planeta Tierra está colocado sobre el umbral. En los próximos seis meses, de acuerdo con la balanza y el juicio del Guardián de los Pergaminos, la determinación final será tomada con base en si hay ó no suficiente número de individuos encarnados que pasen la prueba del diez.

Entonces, permitidme decir: que la Tierra como un cuerpo planetario está en la casa diez de su evolución. Y para que en los próximos seis meses, pueda ascender a la espiral de la casa de la victoria, debe darse una devoción y dedicación fuera de lo común. Entonces, ¿estáis, decididos a ser el equilibrio en las escalas de la Vida, que por el poder de la Victoria pesará más que todos los fracasos de la humanidad?

Yo os digo, esto es posible porque cuando colocáis vuestro momentum de victoria en la balanza, diez mil ángeles permanecerán en la balanza con vosotros. Este es el poder de la luz. Este es el poder de la luz para magnetizar por el poder del diez mil veces diez mil, la más grande cantidad de luz, que pesará más que la oscuridad.

Y os digo, cuando obtengáis la victoria en esta prueba, se os dará el poder del diez mil por diez mil. Y cuando quiera que vosotros levantéis la mano para manifestar el poder de la divinidad del ser, el momentum del diez mil por diez mil, vendrá sobre vosotros, levantaréis vuestra mano derecha, que incrementará el momentum y comunicará el impulso del triunfo a todas las personas y a toda vida.

Habrá el más grande regocijo, a medida que el laurel de la Victoria es colocado, no sólo sobre vuestra cabeza sino sobre las cabezas de todos quienes están unidos a vosotros en el antahkarana de la Victoria Cósmica. Sois la piedra angular (en el arco del ser), si lo aceptáis.

No olvidéis mis Palabras

Debo deciros a cada uno de vosotros, que el poder de la oscuridad es muy grande cuando es pesado en la prueba del tiempo y del espacio, y hará que olvidéis mi dictado y mis palabras. Las legiones de la noche, ya se alinearon contra vosotros para que olvidéis mi dictado y, por lo tanto, cuando las pruebas vengan estad en guardia porque son verdaderamente grandes. Os advierto esto, no para desanimaros, sino para enfocar el poder del Ojo Omnividente de Dios en la discriminación para que de antemano estéis prevenidos.

Surge el Hombre y la Mujer de la Era-Dorada

Ahora mis legiones están reunidas y las diez mil están sobre vosotros. Sellados entonces, damas y caballeros, están los fuegos de la Victoria sobre la coronilla de vuestras nobles cabezas. Estos fuegos están ardiendo a través de vosotros -fuegos de la iluminación ardiendo a través del cerebro, ardiendo a través del cráneo, ardiendo a través de vuestras formas físicas, a medida que aparece el hombre de la Era Dorada-. Todos vuestros ciclos mental, emocional y etérico están recibiendo la purificación del Poderoso Victory y la iluminación del Cristo Cósmico.

Y quiero deciros que es mi labor cósmica y mi autoridad traeros este momentum de Victoria. Lo he dado todo por un millón de años para que fuera posible estar en este lugar y poder transmitiros este momentum. Esto no ha sido un sacrificio sino un regocijo.

Sin embargo, en vuestra octava podría ser tomado como un sacrificio. Por lo tanto, digo: el miedo no sacrificará al pequeño ser, para demostrar el plan del  Ser, para que vosotros  también os convirtáis  en los benefactores de la raza, del planeta y del sistema solar, ¡por el poder del Poderoso Victory!, ¡poder del Poderoso Victory!, ¡poder del Poderoso Victory!, cuyo manto es dado a  vosotros en esta hora para usarlo, mientras decidís destruir el pequeño ser y edificar y resucitar el Gran Ser.

Así, entonces, ¡que ardan los fuegos de la victoria!  ¡Que ardan dentro de los corazones de estos niños! ¡Que ardan dentro de los corazones de estos niños!. De los bebés en los brazos de las madres a través de la faz de la Tierra. ¡Que ardan porque Yo Victory lo de claro!.

La Iniciación de la Era de la Victoria

En el nombre de Alpha y Omega, Yo inicio la era de Victory.

¡Ciclos de Victoria apareced!
¡Ciclos de Victoria apareced!
¡Espirales de Victoria descended

Que el Espíritu Santo, el Eterno Espíritu del Todopoderoso, descienda ahora y Helios y Vesta y el Magneto del Gran Sol Central, todos estén en alineación para la victoria del planeta Tierra.

Ahora, vosotros ya no seréis mortales por más tiempo, sino electrodos de Victoria. ¿Podréis recordad esta identidad, que Yo os transfiero en esta hora? ¿Podréis concebiros desde hoy en adelante y por siempre como electrodos, como llamas ardientes de Victoria?

La Victoria automáticamente transmite iluminación.   La Victoria automáticamente transmite poder.   La Victoria automáticamente transfiere amor. Es la chispa cuyo destello cruza la noche estrellada de la conciencia humana. Ilumina la noche, transforma la conciencia y eleva a todos a la Conciencia Crística, que es la precipitación del oro del Gran Sol Central, el imán de la Era Dorada y del hombre y de la mujer de la Era Dorada.

Yo, Victory he estado en medio de vosotros. Sí hablé pedí otra hora y no pude incrementar el tiempo de iluminación, por eso que ha sido liberado por la autoridad de los Logos Solares Cósmicos y de los Señores del Karma. . .

Es dado a vosotros. Es dado a vosotros como un ardiente propósito, como una llama dentro de vuestro ser. Si pudierais veros internamente en este momento, veríais un templo transparente con orificios que son los puntos de los chakras. Y a medida que os contempláis en ese templo y en esa casa del Dios Viviente, veríais ardiendo desde la cabeza hasta los pies los fuegos de la Victoria Cósmica, los fuegos de la iluminación.

Retenedlos. Amplificadlos y utilizadlos para fijar la marca en los anales del tiempo, en las arenas del tiempo, en la misma tierra, en las aguas, en el aire y en el fuego de la faz de la Tierra. Dejad la huella. Dejad el engrama de la Era de Oro y sellad la marca de la Victoria.

Dejad la marca de la Victoria donde quiera que vayáis y entonces llamad a la humanidad para que siga después de vosotros, porque después ellos no seguirán el ser mortal sino al Ser Divino, que ha reemplazado al ser mortal. Ellos seguirán en la pista de la luz dejada por los diez mil ángeles que hoy han abrazado vuestra causa.

Hijos de la Luz, Hijas de la Luz, sed galardonados con la Victoria. ¡Aceptad el llamado e id a hacer la Voluntad de Dios!.



























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